Volver a empezar

Lo más difícil siempre es empezar.

Saber el lugar exacto que le pertenece a cada cosa.

Tomar decisiones, y volver a empezar.

Cuando le haces caso a tu voz interior,al corazón,
lo demás sobra.

Ya no quedamos tanto como antes,
pero es lo que hace que disfrutes más del momento.

Por otra parte, la importancia de las oportunidades,
hay que estar alerta para subir al tren cuando pase,
y no dejarlas escapar.

Y de lo mal que se pasa cuando quieres decirle algo a alguien
que significa mucho para ti y no era el momento,
ni siquiera sabes que quieres decirle
porque tienes miedo de aceptar lo que sientes.

Todo tiene su sitio
y así, pasito a pasito, uno se siente
cada vez más seguro, como con más fuerza.

Lo malo es que, algunas veces
hay que buscar muy adentro; muy al fondo:
Donde apenas hay luz para ver algo.

Es tan difícil
abandonar los prejuicios y suposiciones
con las que has crecido tanto tiempo,
de pronto, toda tu realidad se transforma
en una sucesión de recuerdos, de sueños....

Hay quien dice que en toda cosa y persona
con las que has tenido contacto a lo largo de tu vida,
parte de tí permanece ahí para siempre.

¿Qué quedará de mi cuando me haya marchado?

Un lugar sin gente siempre me hace sentir cosas;
Me hace pensar la gente que estuvo allí antes:
En cuáles eran sus sueños, sus deseos,sus miedos...
Como si percibiera la esencia de esas personas.

Y tú, ¿De qué tienes miedo?

Lo más difícil, siempre es empezar;

pero poco a poco,

despacito,

cada uno termina

encontrando su lugar.