viernes, 21 de noviembre de 2008

Indecisiones


Nos quedamos atrapados en el aspecto indeciso y dualístico de la mente.
¿Tendría que soltar mis brazos y caer de cabeza primero, o primero soltar mis piernas y caer de pie? ¿Tendría que ir aquí o allí? ¿Tendría que decir sí o no?

Con cualquier decisión que tomemos siempre nos preguntaremos si hubiera sido mejor haber decidido de la otra forma. La única forma de salir del dilema consiste, desafortunadamente, en soltarse de los dos extremos al mismo tiempo.

No puedes encontrar la salida de uno de ellos resolviéndolo, haciendo listas sobre los pro y los contra o, de cualquier forma, trabajándolo con tu mente. Es mejor seguir tu corazón, si puedes encontrarlo.

Si no puedes encontrarlo, salta, simplemente; ¡tu corazón empezará a latir tan rápido que no habrá equivocación respecto adónde se encuentra!

El posponer es simplemente estúpido. Mañana también tendrás que decidir, así que ¿por qué no hacerlo hoy? ¿Crees que mañana serás más sabio que hoy? ¿Crees que mañana serás más vivo que hoy? ¿Crees que mañana serás más joven que hoy, más fresco que hoy?

Mañana serás más viejo, tu coraje habrá disminuido. Mañana serás más experimentado, tu astucia será mayor; mañana la muerte estará más cerca. Empezarás a titubear y a tener más miedo. Nunca aplaces para mañana. Y, ¿quién sabe?, el mañana puede que venga o puede que no venga.

Si tienes que decidir, tienes que decidir ahora mismo. Decídete, no continúes aplazando infinitamente.

Todavía hay demasiados. "¿Y qué pasaría si?... en actividad en la mente. Mañana nunca llega, dicen, pero no importa cuán a menudo se diga, porque la mayoría de nosotros tiende a olvidar la verdad de ésto.

En realidad, el único resultado de posponer las cosas es un sentimiento pesado de inconclusión y estancamiento en el hoy. El alivio y expansión que sientes, una vez dejas de lado todos los pensamientos agitados que te están impidiendo actuar ahora, harán que te preguntes por qué esperaste tanto tiempo.

"Osho"

No hay comentarios: