Un apacible rincón de un lugar conocido con música en directo. El músico se concentra en su instrumento, dejándose llevar como se lleva el viento las hojas de los árboles fuera en la calle. Pone todo su empeño y emoción.
Sin embargo, ella está delante de él, se encuentra físicamente, pero su mente está ausente, ni siquiera tiene cara, porque no interactúa con su entorno como lo hace el músico. No termina de encontrar su sitio.Quiere abrir sus alas y volar.
¿Con qué estará soñando?
(Óleo y acrílico sobre lienzo, la obra actualmente está acabada en la foto faltan algunos detalles la tomé mientras lo realizaba.)
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