Esta tarde, salí un momento de mi bar para ir a hacer unas compras, cuando al pasar por el supermercado, descubrí uno de mis tesoros.( Esas cosas que no tienen precio pero que para otras personas valen millones. Cada vez que alguien me cuenta, descubro un color nuevo, un mundo nuevo. Si fuera una película, digamos que una mezcla entre Amelie y Antes del Amanecer.)
Una muchacha, paseaba tranquila por los pasillos de éste, y creyendo que nadie la estaba viendo, se deleitaba abriendo los botes de suavizantes, cerraba los ojos, y respiraba profundamente, con una sonrisa infinita mientras lo hacía. Mas tarde hizo lo mismo con los perfumes y los jabones.
Me hubiera gustado tener el móvil encima para haber captado ese momento.
A lo mejor ella estaba viajando como cuando lo hacemos mi Vero y yo, pero a Marsella,a la playa, un sitio con flores.... A lo que huelen los suavizantes, o le recordaba un antiguo amor, o una época dorada.
Hay cosas que son típicas en todos, pero hay cosas, que a cada uno de nosotros nos hace felices, son pequeñas cosas, y sólo nosotros valoramos, es lo que nos hace diferentes del resto.
A esa chica le gustaba a escondidas los olores agradables de suavizantes y perfumes, a mi, por ejemplo, me gusta colecionar fotos de amaneceres y de puestas de sol. Amelie hundía la mano en los sacos de legumbres.
Somos unos Bohemios sin remedio
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