Es curioso, las bofetadas que puede darte la vida, y qué poco tiempo necesita para dártelas.
En un instante te estás poniendo un calcetín, y al siguiente te ha dado un derrame cerebral. Nunca mas te podrás poner los calcetines por tí mismo.En un momento estás saliendo a la terraza, y en seguida pierdes el conocimiento y la vida. Nunca mas podrás disfrutar de la brisa fresca...
Por eso hay que vivirla a fondo, disfrutar de cada instante, tomar los placeres que se ofrecen, y relativizar todos los problemas...
Porque en un instante estás.
Y al siguiente,
desapareces.
-Neö-
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